Las actividades deportivas intensas durante los fines de semana, incrementan la demanda funcional del sistema musculoesquelético, que al no tener una preparación física adecuada durante la semana pueden aumentar el riesgo de lesiones debido a la combinación de actividad física de alta intensidad con una capacidad funcional disminuida o estado físico relativamente descondicionado.

Las lesiones en los "atletas de fin de semana" afectan a diferentes grupos de edad de manera distinta, según el tipo de actividad deportiva y la naturaleza de las lesiones. En general, los adolescentes y los jóvenes adultos son los grupos más afectados por este tipo de lesiones deportivas, especialmente en deportes de contacto, mientras que los niños más pequeños son más propensos a sufrir esguinces de tobillo, distensiones musculares, fracturas y lesiones en la cabeza especialmente en deportes como el fútbol y el baloncesto. 

Los adultos son más propensos a lesiones tendinosas sobre todo en las articulaciones del hombro, codo y rodilla debido a la alta demanda de actividades en las que deben saltar y usar los miembros superiores por sobre la cabeza en deportes como el baloncesto, vóley, tenis, pádel etc.  En el contexto de corredores recreativos, las lesiones más frecuentes se dan por sobreuso e incluyen el síndrome de estrés tibial medial, lesiones en los tendones, sobre todo en el tendón de Aquiles y la banda iliotibial. Estas lesiones pueden requerir un tiempo considerable para la recuperación de hasta 70 días con un riesgo alto de cronificación, todo esto debido a la falta de una adaptación y manejo de las cargas de entrenamiento adecuadas.

Para Héctor Padilla, director de la Escuela de Fisioterapia de la UIDE, las estrategias de prevención sugeridas incluyen, el uso de instalaciones deportivas adecuadas, acondicionamiento regular con cargas de entrenamiento apropiadas, entrenamiento específico para el deporte que realizas, uso de equipamiento deportivo en buenas condiciones que se encuentren a tu medida, nutrición equilibrada, hidratación acorde a al peso y la actividad y sobre todo un buen descanso programado son cruciales para mitigar este riesgo de lesiones.

Recuerda que la mayoría de las lesiones ocurren por intentar hacer mucho, muy rápido, después de haber hecho poco durante mucho tiempo.