Rana de árbol- Reserva Mashpi

Cada 3 de marzo desde hace 9 años, se conmemora El Día Mundial de la Vida Silvestre, para recordarnos nuestra responsabilidad con el cuidado del planeta y las formas de vida que habitan en él. El 20 de diciembre del 2013, La Asamblea General de las Naciones Unidas, lo proclamó como un día internacional, con el objetivo de concienciar sobre valor de la fauna y flora silvestre, luchando para proteger las especies amenazadas en todo el mundo.

La Secretaría de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES) anunció que el tema a desarrollar en este 2022 es “Recuperar a las especies clave para la restauración de ecosistemas” creando conciencia sobre el estado de las especies de vida silvestre en peligro y peligro crítico y resaltando el poder de los esfuerzos de conservación que están en marcha para su preservación.

Ecuador ya ha adquirido sus compromisos ambientales, incluyendo la protección de su biodiversidad, en vista de que al menos 1.252 especies de vertebrados se encuentran frente a algún tipo amenaza. Esta lista incluye 217 especies de mamíferos, 238 de aves, 276 de reptiles y 521 de anfibios. La destrucción y fragmentación de hábitats naturales, la sobreexplotación, el tráfico ilegal de especies y la introducción de especies exóticas se miran como sus principales amenazas.

Un claro ejemplo son los animales y plantas endémicos del Chocó Andino, un paraje ubicado en la provincia de Pichincha, también cada vez más conocido como el “bosque de Quito”, que fue declarado por la UNESCO como la séptima Reserva de Biósfera del país y que contempla una gran extensión de bosque nublado, hogar de una gran biodiversidad de especies que viven en este magnífico lugar constantemente amenazado por la minería, la caza y la tala ilegal. Este espacio es hábitat de ejemplares únicos de este tipo de bosque y quienes además mantienen en equilibrio este entorno.

Justamente por las razones explicadas hay muchas empresas, fundaciones y comunidades que han invertido importantes recursos en cuidar y proteger su ambiente. El Grupo Futuro, del cual Metropolitan Touring es parte, ha incorporado a Fundación Futuro como su brazo ejecutor de proyectos sostenibles en la Reserva Mashpi. Aquí se trabajan temas de ciencia y conservación de las especies que habitan en las 2.500 hectáreas de bosque protegido y donde continuamente se realizan actividades de monitoreo de especies y amenazas externas, investigación y reconocimiento de nuevas especies y estudios con organismos nacionales e internacionales.

Bosque de la reserva Mashpi

Hoy en día Mashpi contempla y preserva 418 tipos de aves, 45 ejemplares de anfibios, 67 de reptiles, 396 especies de insectos y 23 de peces. Un dato muy importante es conocer que existen 53 especies de murciélagos en la reserva, representando más de la mitad de los mamíferos registrados y que son los encargados de polinizar muchas de las plantas de este ecosistema. En este mismo marco, actualmente se ha encontrado 208 variedades de plantas con flor, 63 tipos de orquídeas, 101 ejemplares de plantas leñosas, 13 especies de palmeras, 154 clases de briófitas, 40 tipos de hongos y 16 variedades de líquenes, que dependen netamente de la reserva.

“El papel de las especies es importante para el desarrollo de muchos ecosistemas y así mismo para el hombre, ya que subsiste gracias a la vida silvestre y los recursos que nos brinda. El mundo depende de nosotros, de nuestras acciones e iniciativas para cambiar el futuro y darle una oportunidad de vida plena a muchas especies de animales y plantas que conviven con nosotros y merecen un lugar digno en este planeta: Alineémonos hoy al objetivo propuesto por el Día Mundial de la Vida Silvestre” comentó Francisco Dousdebés, Gerente de Responsabilidad Corporativa y Sostenibilidad de Metropolitan Touring.