El mes de mayo de cada año se conmemora el mes mundial de la Hipertensión Arterial. Según la Organización Mundial de la Salud, se estima que cerca de 1300 millones de adultos entre los 30 y 79 años padecen de hipertensión; más grave aún, de acuerdo con la entidad, el 46 % de los adultos hipertensos no son conscientes de que tienen esta afección.
“La hipertensión arterial es una afección que se origina cuando la presión arterial, es decir, la fuerza que ejerce la sangre contra las paredes arteriales, se eleva sostenidamente sobre los niveles considerados normales. Es una enfermedad silenciosa, del 90 al 99% de las veces no se sabe la causa.” explica el Dr. Miguel Vanoni, médico internista y nefrólogo, conferencista nacional e intencional y staff del Grupo Hospitalario Kennedy
Según una encuesta realizada por STEPS 1 de cada 5 ecuatorianos de 18 a 69 años tiene hipertensión arterial y de ellos aproximadamente el 45% desconoce que padece esta enfermedad. La hipertensión no es una condición de salud menor, por el contrario, puede tener graves consecuencias para quienes viven día a día con ella pues la presión arterial elevada representa más del 50 % de las enfermedades cardiovasculares, catalogadas como la principal causa de muerte en el continente americano.
“Hay que entender que la Hipertensión está relacionada con varias enfermedades crónicas que requieren de mucho cuidado y que al ser diagnosticadas a tiempo pueden evitarse complicaciones e incluso la muerte. Por un lado la hipertensión está presente en los pacientes con enfermedad renal crónica pues esta genera un endurecimiento del sistema circulatorio renal y el daño causado en el riñón aumenta la presión arterial. También lo está con la diabetes, 8 de cada 10 pacientes que tienen diabetes tipo 2 tienen hipertensión y está relacionada con la obesidad que tiene el paciente. Su relación más estrecha está con la Falla Cardiaca pues, el corazón bombea contra arterias que son más rígidas o que tienen un diámetro más pequeño entonces se hipertrofia lo que significa que se va a poner mas grueso porque hace un mayor esfuerzo y este cambio anatómico por el sobreesfuerzo hace que después se dilate generando la falla diastólica o falla cardiaca.” Indica el Dr. Vanoni.
Pero, ¿es posible prevenirla?. Los expertos aseguran que sí es posible, desde la campaña Conexiones Vitales se busca concientizar a las personas a dar seguimiento constante de los niveles de presión. Esto puede realizarse desde casa con un tensiómetro digital o manual, los rangos deben estar por debajo de 140/90 para población general y por debajo de 130/80 para los pacientes que tienen diabetes o enfermedad renal crónica.
El ejercicio físico, una alimentación adecuada sirven como parte del tratamiento para los pacientes ya diagnosticados para mejorar la sobrevida y la mortalidad de los mismos y Se recomienda Igualmente, asistir de manera regular al médico y chequear que todo esté en orden con la salud cardiovascular.