Con el fin de mejorar la calidad de vida de los agricultores y fomentar la producción de trigo nacional, el programa Cultiva de Moderna Alimentos ha adquirido cerca de 25 mil toneladas de trigo nacional en los últimos 12 años; durante la última década la compañía ha comprado, en promedio, alrededor del 60% de la cosecha destinada a la industria molinera al precio estipulado por el Ministerio de Agricultura y Ganadería, MAG.
El programa Cultiva beneficia a 582 agricultores de Carchi, Imbabura, Pichincha, Bolívar y Chimborazo, quienes tienen la posibilidad de generar mejores ingresos para sus familias y fortalecer sus conocimientos de forma permanente en cuanto a la siembra, cultivo y cosecha de trigo.
Como parte del eje técnico del programa, entre abril y agosto de este año, los agricultores fueron capacitados en siembra y manejo de cultivo; cosecha, postcosecha y almacenamiento de trigo nacional.
Durante la clausura de las capacitaciones, los agricultores recibieron certificados avalados por el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), el Instituto Nacional de Investigaciones gropecuarias (INIAP) y Moderna Alimentos. Además, realizaron una visita a la planta de producción de la empresa en Cayambe, en donde conocieron el proceso de elaboración de algunos de sus productos.
Esta iniciativa se basa en un modelo de negocio agrícola sostenible, a través del cual Moderna Alimentos apoya a los agricultores interesados en la producción de trigo nacional, desde la entrega de semillas certificadas, el desarrollo del cultivo y la compra del 100% de sus cosechas. Desde el 2014 hasta la actualidad, Cultiva ha entregado 687.875 kg de semillas certificadas por el INIAP a los agricultores registrados en el programa.
De esta manera, Moderna Alimentos fomenta la producción de trigo nacional, asegura la calidad de la materia prima y mejora la calidad de vida de los agricultores que forman parte de su cadena de valor.
El programa Cultiva beneficia a 582 agricultores de Carchi, Imbabura, Pichincha, Bolívar y Chimborazo, quienes tienen la posibilidad de generar mejores ingresos para sus familias y fortalecer sus conocimientos de forma permanente en cuanto a la siembra, cultivo y cosecha de trigo.
Como parte del eje técnico del programa, entre abril y agosto de este año, los agricultores fueron capacitados en siembra y manejo de cultivo; cosecha, postcosecha y almacenamiento de trigo nacional.
“Estas jornadas de formación permiten a los agricultores hacer uso eficiente de los insumos empleados en el cultivo de trigo (suelo, maquinaria, fertilizantes, etc.), a familiarizarse con las nuevas técnicas de producción e, incluso, a manejar personal de forma estratégica”, señala Mariela Gómez, directora de Asuntos Corporativos de Moderna Alimentos.
Durante la clausura de las capacitaciones, los agricultores recibieron certificados avalados por el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), el Instituto Nacional de Investigaciones gropecuarias (INIAP) y Moderna Alimentos. Además, realizaron una visita a la planta de producción de la empresa en Cayambe, en donde conocieron el proceso de elaboración de algunos de sus productos.
“En las capacitaciones tuvimos la oportunidad de conocer más sobre la eficiencia de los cultivos, desde la preparación de suelos, el mantenimiento y la aplicación adecuada de fertilizantes, hasta cómo sacar una mayor utilidad (...). Año tras año hemos adquirido más conocimientos técnicos que nos ayudan a lograr una mejor producción”, asegura Hugo Narváez, productor de trigo en la zona norte del país.
Esta iniciativa se basa en un modelo de negocio agrícola sostenible, a través del cual Moderna Alimentos apoya a los agricultores interesados en la producción de trigo nacional, desde la entrega de semillas certificadas, el desarrollo del cultivo y la compra del 100% de sus cosechas. Desde el 2014 hasta la actualidad, Cultiva ha entregado 687.875 kg de semillas certificadas por el INIAP a los agricultores registrados en el programa.
De esta manera, Moderna Alimentos fomenta la producción de trigo nacional, asegura la calidad de la materia prima y mejora la calidad de vida de los agricultores que forman parte de su cadena de valor.