El gluten siempre ha estado presente en la mesa de los ecuatorianos, en deliciosos pasteles, panes, pastas y más; sin embargo, existe una creciente tendencia de consumo de productos sin gluten, en unos casos por intolerancia, enfermedad u orientados a una preferencia por productos naturales y de etiqueta limpia.

El gluten es un conjunto de proteínas y cada una de las que lo integran tienen distintos efectos en el organismo, algunas producen reacciones indeseadas y molestas como intolerancias de distintos tipos, alergias o problemas digestivos, sin embargo, todo depende de los niveles de tolerancia de cada individuo frente a estas sustancias.

Hoy en día, existen varias opciones para reemplazar alimentos con gluten, las empresas alimenticias han tenido que adaptarse no tan solo a la pandemia y las nuevas necesidades, sino también propuestas más saludables enfocadas en el bienestar integral.

Esta idea de ‘gluten free’ no tan solo aplica para personas con resistencia a este ingrediente, sino también, a la tendencia de alimentarse más conscientemente, aquellas personas que buscan conocer a profundidad lo que consumen y con qué alimentan a su cuerpo.

Un gran porcentaje de marcas han apostado por invertir en innovaciones y nuevos productos con este enfoque de nutrición consciente y bienestar integral, un ejemplo de ello es Alpina, quien invirtió el 95% del presupuesto anual de la marca para renovar su producto Finesse, un yogurt deslactosado, sin gluten, sin azúcar añadida, sin colorantes artificiales y sin grasa.

¿Por qué hablar de yogurt? Si bien es cierto, el yogurt en su forma pura no contiene gluten, no obstante, este puede tener componentes que a su vez si lo contengan; por lo tanto, es de suma importancia identificar toda la tabla nutricional y demás mensajes que pueda tener el empaque; el gluten puede estar en varios productos no necesariamente pan, pastas o tortas.

Si eres intolerante o no deseas consumir gluten debido a tu estilo de vida, te recomendamos los siguientes productos: yogurt natural, frutas, legumbres, harinas sin gluten, proteínas como carne, pescado, mariscos, aceite de oliva, entre otros.