Las loncheras escolares son claves para generar hábitos nutricionales saludables en los más pequeños de la casa.
La preparación de los refrigerios debe ser un aspecto primordial para lograr el equilibrio entre educación y nutrición, ya que es un tiempo ideal para que los niños construyan una buena relación con la comida y tomen decisiones acertadas.
Para la nutricionista, Sara Mafla “aspectos como la composición de la lonchera, la inclusión de alimentos variados y el uso de productos que garanticen la seguridad alimentaria son clave”. Asimismo, “cuando hablamos de nutrición podemos enfocarnos en los macro y micronutrientes que, definitivamente, son muy significativos dentro de la lonchera escolar”.
A continuación, la nutricionista comparte consejos para la elaboración de una lonchera completa:
1. Incluir alimentos variados y necesarios
Planificar las loncheras permite ahorrar tiempo y dinero; además, hacerlo con conciencia ayudará a elaborar un menú balanceado y completo. Se recomienda incluir carbohidratos como la principal fuente de energía, tales como pan, verde, yuca, chochos, tostado y pan pita.
No se pueden dejar de lado las proteínas, fundamentales para el desarrollo y crecimiento. “En este grupo encontramos los lácteos (como leche, yogurt y queso), carnes, huevos, granos secos, tofu y hummus. Estos contribuyen al desarrollo muscular y de todos los tejidos del cuerpo”, asegura la nutricionista.
Se recomienda incluir también grasas como fuente importante de energía; además contribuyen al balance hormonal y absorción de vitaminas liposolubles como la A, D, E K. Resulta conveniente incluir frutos secos como almendras, nueces, maní y pistacho, y semillas de girasol, ajonjolí y zambo, entre otros.
Las frutas y vegetales son un grupo de igual importancia por su alto contenido de vitaminas, minerales y fibra, por lo cual son infaltables en las loncheras escolares.
2. Incluir alimentos con valor emocional
Existen alimentos que quizá no tengan un valor nutricional alto, pero sí emocional, cultural o social para los niños. Ese es el caso de los snacks, dulces o postres, que pueden incluirse a manera de bocados para los pequeños; es una buena manera de estimular su buena relación con la comida. Al respecto, Mafla afirma que “para empezar a seleccionar y conformar la lonchera, se recomienda preguntar al niño o niña sobre lo que quisieran llevar, darle opciones que sean parte de los diferentes grupos de alimentos, que se tenga en casa o que puedan comprar y hacer la lonchera juntos”.
3. Cuidar la seguridad alimentaria
Los niños deben tener acceso a alimentos que sean nutritivos, pero que además sean seguros. Por ello, es necesario considerar productos en envases que garanticen su seguridad e inocuidad, como los de Tetra Pak®. Además de que conservan alimentos como los lácteos y los jugos por más tiempo, sin necesidad de conservantes o refrigeración, son reciclables.
Tetra Pak, como la compañía líder en procesamiento y envasado de alimentos y bebidas, está comprometida en impulsar una alimentación sana para los niños y niñas, por ello ha desarrollado constantemente nuevas opciones que permitan ofrecer alimentos de calidad, que garanticen su seguridad alimentaria.
De esta manera, los más pequeños de la casa disfrutarán de una lonchera completa, pero no dejarán de lado la seguridad alimentaria de aquellos productos que llevan a sus escuelas.