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● El estudio de Multitrabajos.com arrojó el nivel más alto de agotamiento laboral registrado en Ecuador desde que se realiza.
Según el estudio Burnout 2023 realizado por Multitrabajos.com, portal líder de empleo del país, los ecuatorianos ocupan el cuarto lugar de las personas trabajadoras más “quemadas” de la región y este año se registró que el 79% de encuestados afirma atravesar el síndrome de burnout; un agotamiento excesivo en el contexto laboral. El estrés y la desmotivación son las principales sensaciones que los talentos experimentaron durante el último año.
La cantidad de personas trabajadoras que experimentan burnout va en crecimiento en el país: en 2020, plena pandemia, un 56% lo experimentó. La edición del estudio del año pasado reveló que el 74% sentía el agotamiento laboral, mientras que este 2023 se registró el nivel más alto de síndrome de burnout en Ecuador con un 79%.
“En esta cuarta edición de nuestro estudio, podemos observar que el síndrome de burnout aqueja cada vez a más personas trabajadoras en Ecuador. Los datos muestran que este fenómeno sigue en expansión en el mercado laboral local y que el país lidera esta tendencia a nivel regional”, sostiene Jeff Morales, gerente de marketing de Multitrabajos.com.
Burnout 2023 es un estudio regional de Multitrabajos realizado a personas trabajadoras y especialistas en RRHH. En el estudio participaron 4386 personas: 452 de Ecuador, 1549 de Argentina, 754 de Chile, 464 de Panamá y 1167 de Perú. La investigación explora cómo experimentan los talentos el síndrome de burnout y qué políticas implementan los especialistas en RRHH para mitigarlo.
Ecuador se adjudica el cuarto lugar a nivel regional con cifras más altas de talentos que experimentan el síndrome de burnout. Argentina es el país de la región en el que más talentos sufren burnout, seguido de Chile; con un 91%, Panamá, con un 83%; y, por último, Perú, con un 78%.
Estos resultados también se evidencian en que un 89% dijo sentirse más quemado que el año anterior. Mientras que en 2022 solo un 83% había afirmado estar más agotado que en 2021
¿Qué es lo que sienten? Un 32% de los trabajadores afirma sentir falta de energía o cansancio extremo; mientras que el 21% experimenta negativismo o cinismo en relación con el trabajo. Otro 21% presenta todos los síntomas de las opciones anteriores y un 14% advierte una disminución en su eficacia para trabajar. Sólo el 14% no padece ninguno de los síntomas de burnout.
Los talentos atravesaron diferentes situaciones negativas en el ambiente laboral durante el último año. El 18% siente estrés; el 14% está desmotivado o desmotivada; el 9% experimenta un agotamiento fuera de lo normal por la carga excesiva de trabajo; otro 9% siente que tiene más presión que antes, el 8% no logra desconectarse de su empleo y le cuesta encontrar tiempo para sí mismo, mientras que al otro 8% las tareas le demandan más tiempo de lo habitual; un 7% nota que disminuyó su rendimiento y productividad; al otro 7% le cuesta encontrar tiempo para su familia y otro 7% no tiene tiempo para sí mismo. El
6% se siente aislado o aislada de su equipo y considera que la comunicación no está fluyendo de la mejor manera; el 5% sufre insomnio; y un 2% atravesó situaciones de violencia laboral.
El 65% de los
talentos manifestó trabajar más de lo que dura su jornada laboral. A diferencia
del 2020, en donde el 55% afirmó realizar tareas por fuera de su horario de
trabajo. En 2021 el 52% trabajaba de más; aunque se evidencia una disminución
respecto a las cifras del año 2022 en la que arrojaron a un 67%. Parece no
haber una correlación entre las horas extras trabajadas y el aumento del
burnout.
¿A qué atribuyen las personas trabajadoras el burnout? a la sobrecarga de trabajo, lo que implica un (28%); al trato de sus superiores (19%); (a la presión en el trabajo (16%); a la falta de claridad con respecto a lo que mi rol implica (12%), a la falta de tiempo para llevar a cabo todas sus tareas (11%), a sentir que no se está a la altura del rol (9%) y a la falta de identificación con los valores de la organización (6%).
A pesar de que un 79% de las personas afirma sentirse “quemadas", el 17% no realiza ninguna actividad para sentirse mejor y el 4% no piensa hacer nada para mitigar el burnout.
Sin embargo, realizan actividades para prevenir o disminuir el agotamiento. El 24% hace ejercicios físicos, como ir al gimnasio, y de relajación, como el yoga, el 25% prefiere leer, mirar series y hacer actividades que los desconecten de la rutina, el 21% intenta mantener el contacto con sus seres queridos, el 5% desconecta los dispositivos de trabajo luego del horario laboral; y otro 5% mantiene una rutina diaria que lo ayude a disminuir la incertidumbre y que le genere menos estrés.
El 84% de los profesionales de HR no implementan medidas puntuales para combatir el burnout
El 84% de los expertos en Recursos Humanos advierte que los talentos de sus organizaciones sufren burnout o están “quemados”. El 20% de ellos calcula que un 30% de sus empleados están padeciendo este síndrome, un 14% cree que el 80% lo experimenta y otro 14% que el 60% lo sufre.
“Este año decidimos invitar a los especialistas en HR al estudio para que sumen su percepción del fenómeno. El 84% notó que las personas trabajadoras de su organización experimentan burnout y un 60% contó que los talentos afectados se acercaron a su área para informar la situación. Sin embargo, la mayoría aún no implementa medidas para prevenir o combatir este síndrome. Una de las grandes oportunidades del área de Recursos Humanos es empezar a poner foco en esta problemática, que va a significar una mayor calidad de vida para quienes lo atraviesan y una mayor productividad para las compañías”, explica Morales.
Los comportamientos que los especialistas observaron y les indicaron que las personas trabajadoras sufren burnout son: la demostración de cansancio y agotamiento constante (63%), el desinterés en el trabajo (42%), un trato distante o insensible respecto a los demás (37%), porque demostraba falta de satisfacción en los logros laborales (32%) y un 14% porque empezó a faltar al trabajo.
¿Los talentos afectados se acercan al área de RRHH para manifestar que están “quemados” o atravesando los síntomas que caracterizan al burnout? Un 60% de los especialistas respondieron que sí, mientras que un 40% asegura que nunca lo hicieron.
Entre los principales síntomas de burnout que identifican en los talentos, se encuentran: la pérdida de la motivación y el entusiasmo en el trabajo (14%); el desinterés en el trabajo y la disminución del rendimiento (16%); cansancio crónico y agotamiento constante (13%); cambios en el comportamiento, como irritabilidad o aislamiento (13%); dificultades para concentrarse y tomar decisiones (9%); aumento del ausentismo laboral (6%); mayor susceptibilidad a enfermedades (8%) insomnio o problemas para dormir (8%); falta de satisfacción respecto a los logros laborales (6%); y un trato distante o insensible para con los demás (7%).
Una vez que se detecta que un trabajador sufre de burnout, ¿cómo actúan desde el área de Recursos Humanos? El 75% de los especialistas afirmó que no se hace nada el 25% brinda apoyo emocional.
El 75% de los especialistas sostiene que en la organización en la que trabajan no se implementan estrategias o medidas para prevenir o disminuir el burnout. En las instituciones en las se llevan adelante estrategias o medidas, las seleccionadas son: la flexibilidad en los horarios y la modalidad de trabajo (12%), los programas de bienestar emocional y mental (13%), los programas de incentivos y reconocimiento con otro (12%).
Las causas más comunes de burnout para los especialistas son: la carga excesiva de trabajo (14%); el ambiente laboral tóxico (10%), la falta de motivación laboral (10%), la falta de reconocimiento (9%) y el apoyo de los superiores con otro (9%).
¿Cómo impacta que los talentos estén “quemados” en la organización? El 22% considera que se reduce la calidad de trabajo; el 17% cree que aumenta la rotación de personal; otro 17% sostiene que disminuye el compromiso organizacional, el 12% que Impacto negativo en la cultura organizativa; para un 14% se produce la pérdida de talentos y un 12% habla de un impacto negativo en la cultura organizativa; mientras que para el 11% hay un posible crecimiento de conflictos internos entre compañeros de trabajo y el 7% considera que hay un aumento de costos de acompañamiento médico.
